La semana pasada se desarrolló en Lima la Feria ExpoPesca & AcuiPerú 2017, una de las más importantes en su rubro en la región. En este evento propusimos apuntar hacia una ‘pesca y acuicultura 2.0’, con un nuevo norte de crecimiento más cercano a las tendencias del consumo mundial.
¿Qué significa esto? Pues que debemos apuntar a una pesca y acuicultura que nos permita ser parte de las grandes tendencias mundiales de productos listos para consumir, que complemente el espacio ya ganado en pescados frescos para el consumo local y en ingredientes marinos que sustenta a la acuicultura mundial.
En otras palabras, vemos que el nuevo escenario al que debemos entrar como país es el uso de la anchoveta en la fortificación de alimentos, que sirvan como vehículo para que los nutrientes de esta especie lleguen a las personas de forma efectiva.
En este punto me gustaría hacer alusión a la última reunión del Programa Mundial de Alimentos (FAO), realizada esta
semana en Roma, donde se ha tocado el tema de la fortificación de alimentos para atender la desnutrición de niños de 0 a 3 años.
Como vemos, el sector pesquero es sumamente relevante para el país. Los peruanos estamos orgullosos de esta actividad, que es milenaria y ha sido importante para la vida económica de la nación.
Desde la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP) estamos convencidos que de lo dicho anteriormente y por ello nuestras empresas asociadas ya están trabajando al respecto. Creemos que será la mejor forma de incrementar el consumo de productos hidrobiológicos en el país y así enfrentar a la anemia que tanto afecta a muchos de nuestros compatriotas.
Foto: TASA